Las torrijas son deliciosas pero cuando te comes un par de ellas, la cantidad de aceite que suelen absorber hace que caigan pesadas al estómago, por eso hemos querido hacer la versión de torrijas más saludables.
En este caso hemos sustituido la leche por bebida vegetal. Yo utilicé de avena, que de por sí es muy dulce (puedes utilizar cualquiera) y la hemos infusionado una media hora a fuego suave con cáscara de limón, naranja, vainilla y una ramita de canela.
Se utiliza una barra de pan integral del día anterior algo dura y se corta a rebanadas de 1 cm.
Cuando está fría, se pasan por el líquido y dejamos empapar un rato pero cuidado que no se deshagan. Después se pasan por huevo igualmente.
Y en lugar de freirlas en abundante aceite, usamos una sartén que no se pegue y echamos muy poquito aceite de oliva. Se le dan varias vueltas con cuidado para que queden como a la plancha. Y al sacarlas se pasan por canela sólo, por eso las veis en la imagen más oscuritas.
Quedan bastante ricas, jugosas y algo menos calóricas!!!
Otra opción saludable es utilizar el horno y en lugar de pasarlas por la plancha, las ponemos a gratinar unos minutos a 200 grados y les damos la vuelta cuando se doren. (mi horno falló al gratinar y tuve que abandonar la idea).
Estas son buenas ideas para reducir grasa y hacer unas torrijas más saludables y no dejar de disfrutar de estos dulces tradicionales.
Besitos y feliz semana.
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