Bocaditos de verdura, receta para niños

Receta para niños…y mayores, pero ¿no crees que viéndo estos bocaditos les pueden atraer más? Es la idea. Creo que siempre gusta más un plato colorido y atractivo que algo que ha visto habitualmente, sobre todo si es un niño más delicado para comer. Conseguir que con estos bocaditos de verdura se animen a comer verdura sin apenas darse cuenta. Los niños se tienen que ir acostumbrando a comer variado, lo que les gusta y lo que no. Y creo que es una buena manera de acercarles a probar algo diferente.

Los bocaditos pueden hacerse de cualquier verdura que tengas en casa: calabacín, berenjena, coliflor, judías verdes etc. Puedes combinarle una que le guste con otra que no conozca, o que le agrade menos. Las verduras tienen que formar parte de su menú diario. El pastel de quinoa y espinacas que publiqué hace poco también te puede servir de idea para varias las cenas. Estos bocaditos son de espárragos y calabacín. ¿A que tienen muy buena pinta? Seguro que a ti te salen mejor. Las fotos no son ninguna maravilla pero quería daros la pista para cocinar para ellos.

Sólo necesitas unos moldes de silicona de magdalenas, muffins o tartaletas (se desmoldan más fácilmente y son muy limpios).

A mí me salieron 8 bocaditos, 6 con moldes de magdalenas y 2 de tartaletas. Quería probar la consistencia en cada caso, y puedo decir que no hay mucha diferencia. Con el de magdalenas me quedaron un poquito más blanditos, pero igual de ricos.

Ingredientes: (para 8 bocaditos)

4 huevos
Un poquito de leche o bebida vegetal (sólo para dar ligereza a la mezcla)
1 manojo de espárragos verdes
Medio calabacín
Media cebolla
Queso rallado (opcional)
Sal y pimienta
Perejil picado
½ cucharada de nuez moscada

Elaboración:

Doramos en una sartén con un poquito de aceite la cebolla picada.
Añadimos los espárragos y el calabacín troceados (en trozos no muy grandes). Salpimentamos y salteamos unos minutos.
Precalentamos el horno a 180º
En un bol batimos los huevos y añadimos la nuez moscada y el perejil picado. Ahora el queso rallado. Removemos bien para que se mezcle.
Incorporamos al bol el salteado de la sartén y mezclamos para que se integre todo.
Colocamos en una bandeja de horno los moldes. Vamos rellenando con una cucharada dejando un poco de espacio para que suban al hornearse.
Introducimos en el horno y en 15 minutos tenemos nuestros bocaditos listos.
Prueba como siempre con un palito para ver si están completamente hechos.

Lo puedes acompañar de un pescado como si fuera una guarnición o para cenar como plato único. Es muy completo y sano porque unimos la proteína del huevo con la verdura, muy necesario para el crecimiento de los niños.